La falta de metros cuadrados, la luz natural limitada y la cantidad de accesorios que siempre nos hacen falta, convierten a un baño pequeño en uno de los espacios más desafiantes a la hora de diseñar. Pero si lo hacemos bien, toda la habitación puede parecer más brillante y más espaciosa. Y no, no tendrás que gastar un miles de euros en abrir una ventana en la pared.
Estas pequeñas ideas que os traigo hoy van más allá de aprovechar al máximo el espacio disponible y demuestran que los elementos de diseño audaces pueden estar en casa incluso en las habitaciones más pequeñas. Estas son las mejores formas de convertir los aseos y los baños pequeños (a veces sin ventanas) en lugares menos estrechos y más agradables. Tu pequeño baño puede ser tu próxima habitación favorita 😉
1. Mantén los colores claros y brillantes (o haz todo lo contrario y apuesta todo al negro!)
Un suelo y tocador de madera clara le darán al baño una sensación cálida y serena. Un tono suave, como un verde menta por ejemplo, refleja la luz natural de la ventana. El espacio que rodea la bañera hace que la habitación parezca más abierta, al igual que la tela semitransparente de la cortina, que permite la máxima entrada de luz.
Pero, ¿y si hacemos justo al revés? Un color oscuro, como el negro, da profundidad y crea una ilusión de un espacio más grande. Eso sí, siempre hay que utilizar un brillo intenso en un color súper oscuro. El tono impartirá simultáneamente un gran efecto de cielo nocturno y también rebotará la poca luz que tiene alrededor del espacio. Al hacerlo, también atraerá la atención sobre los artefactos de iluminación, señala, por lo que deberemos elegirlos cuidadosamente: bombillas que den mucha luz y formas que llamen la atención.
Si además hacemos una pared entera de espejo, en lugar de simplemente colgar uno sobre el tocador, el reflejo de la luz y el patrón de la pared (y, a veces, esa puerta abierta) hará el mismo buen trabajo que una ventana. O, si hacer un espejo en toda la pared no es una opción, simplemente puedes agregar varios espejos a una pared haciendo una composición.
2. Instala una puerta corredera
Aunque este truco requiere un poco más de trabajo, reemplazar la puerta tradicional por una corredera, puede abrir espacio para almacenamiento adicional. Solo tendrás que encontrar otro lugar para colgar las toallas. Además, si no tienes un tabique lo suficientemente grueso para esconder la puerta dentro, o simplemente no quieres hacer obra, siempre puedes instalar la puerta con una guía exterior, simulando las puertas de granero que tan de moda están ahora.
3. Mantén el suelo despejado
Cubrir el suelo con un tocador o con almacenamiento puede crear un espacio estrecho, sin mencionar los riesgos de tropiezos. Un lavabo flotante o de pedestal mantiene el suelo despejado, y colocar los accesorios de almacenamiento en la pared ayudarán a mantener todo lo necesario al alcance de la mano. Instala también inodoros compactos o flotantes para abrir el espacio. Y si una bañera es imprescindible, consideraremos una bañera japonesa (esas que parecen barreños bonitos) para agregar serenidad sin ocupar demasiados metros cuadrados.
Otras ideas que hacen parecer el espacio más grande serían instalar la grifería a la pared (que además es más fácil de limpiar), reducir la colección de champús (o, al menos, almacenar los productos que no son de diario en un lugar que no sean tan visibles) o anclar el toallero al lateral del lavabo. Deshacerse de cualquier desorden hará que el baño parezca mucho más grande.
Y por último, si tienes la opción, instala una claraboya. Esta es una de las ideas más ambiciosas para un baño pequeño, pero tendrá un gran impacto. Instalar una claraboya abrirá todo el baño y alegrará significativamente el espacio.
Espero que este artículo te sirva para sacar todo el provecho a esa habitación que siempre nos cuesta tanto resaltar. Si tienes alguna idea concreta, o alguna duda, no dudes en contactar conmigo!
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