«El Bosque de la Vida»

Uno de los retos más difíciles al que me he enfrentado de momento fue el que me plantearon para el Proyecto Fin de Máster.

Nos dieron el plano completo del hospital materno-infantil Vall d’Hebron de Barcelona. Teníamos que estudiarlo, buscar necesidades y decidir cómo solucionarlas, planteando una propuesta concreta y realista.

El hospital Materno-Infantil, situado en el barrio Horta-Guinardó, en la parte alta de Barcelona, disfruta de unas vistas privilegiadas tanto
a la montaña como a la costa barcelonesa, consta de 2 edificios, uno de 3 plantas con consultas, aulas y zona de hospitalización, y el otro de 15 plantas dedicadas a hospitalización e investigación/laboratorios.

Existe solamente una cafetería en el hospital, ubicada en la plata baja del Edificio 1. En el Edificio 2, se encuentran 3 conjuntos de ascensores con mucha afluencia tanto de personal como de pacientes y familiares.

Después de darle mil y una vueltas, estudiar los flujos de personas, los movimientos que se realizaban por el edificio, las instalaciones y los espacios existentes, me di cuenta de que el hecho de que no hubiese dentro del hospital más que una sola cafetería o una plaza exterior donde los niños que tenían permiso para salir a la calle podían jugar se traduce, en definitiva, en pocos lugares donde los niños que están ingresados de larga duración o que, por las circunstancias de la enfermedad no pueden salir a la calle, pudiesen disfrutar de momentos de ocio con sus familiares o amigos.

Se detectaron las siguientes NECESIDADES:

• Diseñar un espacio de ocio dedicado a pacientes y familiares, así
como otro de descanso diferenciado para el personal de las plantas
superiores, evitando así que todo el equipamiento de descanso y ocio
se ubique solo en el Edificio 1
• Aligerar la afluencia de la única cafetería existente
• Descargar el tránsito de los ascensores

Y se propusieron los siguiente OBJETIVOS:

• Crear en la planta 6º del Edificio 2, de 700m2, actualmente en
desuso, dos particiones dedicadas a personal y pacientes o familiares
• Diseñar una zona de esparcimiento para personal, con cafetería,
comedor y zona de relax
• Diseñar una zona de visitas y de ocio para pacientes y visitas, con
cafetería, zonas verdes, zona de juegos, cine y zona para visitas de
mascotas, dos actividades que se ha probado son muy beneficiosas
para pacientes de larga estancia

De todo esto, surge el concepto de «EL ARBOL DE LA VIDA»:

Está demostrado. Ser feliz, cura. Y en un hospital infantil, ser feliz, significa jugar, reir, y estar acompañado de las personas más queridas.

Por eso, les damos a los niños un espacio donde puedan seguir siendo niños aún cuando las circunstancias no son las más deseadas. Un espacio, donde olvidase por un rato de batas blancas, medicamentos, tubos y tristeza. Donde recibir a las visitas, pasar un rato con sus amigos, ir al cine o jugar con sus mascotas.. Para que no sólo sean niños, sino para que se conviertan en superhéroes que pueden con todo

La idea final consistió en crear un espacio dividido en diferentes zonas, la cafetería, una zona de juegos, una zona donde los niños podrían recibir la visita de sus mascotas (un protocolo que se está probando en muchos hospitales alrededor del mundo con muy buenos resultados) e incluso un cine.

Espero que os guste! Haz click en la imagen para verla en grande 🙂


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